Nos hemos convertido en una especie urbana, sin embargo necesitamos pasear y estar en contacto con la naturaleza.

“Por primera vez en la historia, más del 50% de la población mundial vive en zonas urbanas. Para 2050, el 70% de la población mundial vivirá en pueblos y ciudades.” nos avisan desde la OMS (OMS, 2010).

El mundo se está urbanizando rápidamente y esto provoca una grave alteración del ciclo natural del agua, entre otras consecuencias relacionadas con el cambio climático. Además nos afecta a nuestra salud, comportamiento social y estilo de vida.

Las ciudades son receptoras y generadoras de cambio climático. Aumentar la infraestructura verde ayuda a revertir la situación según Olga Algayerova, directora general de la Comisión Económica de las Naciones Unidas para Europa (Toharia, 2019).

Vista general de “La misteriosa historia del jardín que produce agua” | Autores de la obra: cómo crear historias | Autor fotografía: David Frutos

En el ciclo natural del agua, parte de la precipitación la interceptan las plantas antes de tocar el suelo. El resto se infiltra en el terreno aumentando su humedad. Cuando no puede absorber más, se acumula formándose acuíferos, lagos, ríos, … que conectan con nuestros mares y océanos, donde flota nuestro verdadero pulmón del planeta (Lorca, 2019). De esta forma, los lagos, acuíferos, ríos y embalses son las principales fuentes de agua dulce de consumo humano. Completa el ciclo, la evapotranspiración vegetal y la evaporación a través de la acción del sol, que devuelve el agua a la atmósfera  en forma de vapor y cierra el ciclo (Trapote Jaume & Fernández Rodríguez, 2016, p.5).

Sin embargo, el proceso de urbanización, viene acompañado de un aumento de las superficies impermeables que no dejan filtrar el agua al terreno. Los paisajes naturales desaparecen y esto modifica el ciclo del agua y altera su composición. El agua circula a grandes velocidades por superficies impermeables y va arrastrando toda una colección de contaminantes que acaban en nuestros ríos, humedales y mares. También ocasiona un gran problema de drenaje y de gestión del agua de lluvia (Trapote Jaume & Fernández Rodríguez, 2016, p.5). Los sistemas de drenaje convencionales colapsan, pues se ven obligados a absorber grandes cantidades de agua en muy poco tiempo, por lo tanto la manera tradicional de urbanizar, contribuye a la creación de inundaciones.

New Orleans | Fuente: Pixabay

SUDS - Diagramas del ciclo del agua en la naturaleza y en la ciudad

“Las inundaciones son fenómenos dinámicos, complejos, multidimensionales e influidos por variables humanas y ambientales.Así influimos los humanos en las inundaciones de la cuenca mediterránea (González, 2019)

Si a este proceso de impermeabilización de la superficie y distorsión del ciclo natural del agua, le sumamos la ubicación indebida en espacios potencialmente inundables y que los episodios de lluvias torrenciales y las olas de calor, pueden intensificarse con el cambio climático, el desastre está servido.

Las inundaciones causan grandes pérdidas humanas y materiales. De hecho, la inundación es la causa que más pérdidas económicas ocasiona (un 69.90% de cuantía pagada por los seguros) y la que presenta un mayor número de incidencias (seguida por las tempestades ciclónicas atípicas) según los datos del Consorcio de Compensación de Seguros entre los años 1987-2016 (Consorcio de Compensación de Seguros, 2018, p.6).

El daño está hecho, seguirá produciéndose y te afecta de manera directa cada vez más. Pero no nos quedemos ahí, en el mensaje negativo, tratemos de contribuir a poner una solución.

Diagramas de ciclo del agua en la naturaleza y en la ciudad | Infografía: cómo crear historias | Fuente: Hidrología Sostenible e Iglesias Diaz, 2013

¿Qué puedes hacer tú para evitar las inundaciones?

Las acciones que puedes realizar, son diferentes según las oportunidades que tengas de ponerlas en práctica:

  1. Lucha contra el cambio climático, estamos ante un estado de emergencia climática. Piensa cómo están contribuyendo tus acciones al cambio climático y trata de buscar una alternativa sostenible en la medida de lo posible. Es una medida a largo plazo y requiere la colaboración todas las personas. Toda acción suma.
  2. No construyas ni vivas en zonas que puedan inundarse (Observatorio de la Sostenibilidad, 2019) ni dentro de la Delimitación del Dominio Público Hidráulico. Eso es obvio, sin embargo, según advierte Santiago Martín Barajas, ingeniero y responsable del área de aguas de Ecologistas en Acción en la Cadena Ser, son ya 50.000 las construcciones en zonas de alto riesgo de inundación (Gregori, 2019).
  3. Renaturaliza tu ciudad, no impermeabilices el suelo o por lo menos, si lo tienes que hacer, que sea lo mínimo posible. Respeta el ciclo natural del agua ¿cómo? usa Soluciones basadas en la Naturaleza (IUCN, 2017), como los Sistemas Urbanos de Drenaje Sostenible (SUDS) acompañados de una renaturalización el espacio a través de plantas y árboles. Contribuye a crear una infraestructura natural para la gestión del agua. Y aquí es donde quería llegar con este artículo, a hablaros de los SUDS para animarte a incluirlos en tus espacios si tienes la oportunidad.

Inundación | Fuente: Pixabay | Autoría: skeeze

¿Qué son los sistemas urbanos de drenaje sostenible o SUDS?: la naturaleza como fuente de inspiración

Los SUDS son elementos de la red de drenaje que permiten recoger, transportar, descontaminar, retener, infiltrar y evacuar el agua de lluvia de manera sostenible (Trapote Jaume & Fernández Rodríguez, 2016, p.10).

Se trata de Soluciones basadas en la Naturaleza que se apoyan en el ciclo natural del agua para hacer más sostenible su gestión, filtrando las precipitaciones en el terreno o  retardando su entrada en los sistemas de drenaje.

Su objetivo es resolver los problemas de cantidad y calidad de la escorrentía urbana, a través de la renaturalización urbana, minimizando el impacto. Con ello se consigue un fomento de la biodiversidad, con los valores ambientales y sociales que supone para nuestra salud y la de nuestro entorno.

“La misteriosa historia del jardín que produce agua” | Autores de la obra: cómo crear historias | Autor fotografía: David Frutos

¿Por qué necesitas SUDS?: beneficios y contribución a la resiliencia climática

Si los SUDS cuentan con vegetación:

  •  Disminuyen el volumen y caudal punta de la escorrentía: la vegetación intercepta el agua de lluvia y el resto se retiene, por lo tanto, reduce el volumen de agua de escorrentía en los momentos pico.
  • Aumentan la proporción de área permeable.
  • Estimulan la biodiversidad del entorno al ser soporte de una flora que atrae a la fauna.
  • Retienen sedimentos, aceites, metales pesados y otros contaminantes, por lo tanto mejora la calidad del agua mejorando la calidad del agua y del aire.
  • La lluvia que cae sobre la vegetación, se devuelve a la atmósfera por evapotranspiración.
  • Recargan los acuíferos.
  • Ayudan a combatir el efecto isla de calor de las ciudades.
  • Absorben el ruido urbano.
  • Los sistemas con almacenamiento efímero de agua en superficie, introducen áreas que junto a la vegetación, mejoran la calidad estética del entorno y constituyen una infraestructura verde y azul.
  • Flexibilidad a la hora de diseñar para adaptarse a los entornos urbanos, en la mayoría de los casos.

En el caso de ubicarse en construcciones:

  • Reducen del impacto del edificio sobre el entorno al recuperar la superficie ocupada e impermeabilizada en planta, en la cubierta.
  • Actúan como aislante térmico, mejorando además la durabilidad de la cubierta, al protegerla.

“La misteriosa historia del jardín que produce agua” | Autores de la obra: cómo crear historias | Autor fotografía: David Frutos

La caja de herramientas de los SUDS

Hay multitud de tipos de SUDS todos con el mismo objetivo y que pueden utilizarse de manera combinada según la situación (Perales Momparler et al., 2018) (Trapote Jaume & Fernández Rodríguez, 2016). Cada sistema tiene sus criterios de diseño, beneficios, requisitos de mantenimiento y limitaciones, hay que estudiar de manera específica su aplicación.

Incluir estos sistemas por lo general, no supone una gran repercusión sobre el coste de la obra con respecto a todos los beneficios que aporta a nuestro entorno. A continuación os mostramos un breve listado de algunos SUDS con una breve descripción:

  1. Cubierta vegetal o ajardinada

Sistema multicapa capaz de albergar vegetación sobre una capa drenante y una membrana impermeabilizante sobre la cubierta de un edificio. Puede situarse en tejados, azoteas y terrazas de todo tipo. Su espesor puede variar según su capacidad de retención de agua y el tipo de vegetación. Un buen diseño de cubierta ajardinada puede aportar grandes beneficios climáticos y de confort a las construcciones, además de el disfrute adicional y fomento de la biodiversidad que supone contar con un jardín en la cubierta.

Un ejemplo de este sistema es la cubierta ajardinada de Espora.

Detalle de Parque urbano “La Marjal” en Alicante | Autoría fotografía: Aguas de Alicante

  1. Pavimento permeable 

Estructura portante que permite el paso de peatones y tráfico rodado así como la filtración de agua de lluvia hacia una capa inferior de almacenamiento temporal compuesta por gravas, celdas y/o cajas reticulares. Después de almacenarse, se evacúa por infiltración al terreno para recargar los acuíferos.

Ejemplo: Sistema de pavimentos permeables de LafargeHolcim.

  1. Jardín de lluvia o rain garden

Es un depresión poco profunda, inundable y vegetada que actúa como un bosque nativo recogiendo, absorbiendo y filtrando las aguas pluviales de las áreas impermeables del entorno (Iglesias Díaz, 2013). Su instalación es sencilla y poco costosa. El agua se filtra y se evacua en menos de 48 horas, pues un estancamiento prolongado podría introducir problemas de mosquitos y olores. Un buen diseño de jardín de lluvia proporciona grandes beneficios para la biodiversidad y el disfrute sensorial.

Sistema de cubierta ajardinada de Espora | Autoría: Espora

  1. Parque inundable

Es el “hermano mayor” de los jardines de lluvia. Es una gran superficie que durante la mayor parte del año, funciona como un parque normal, sin embargo, cuando hay eventos de lluvia, actúa como un gran depósito que recibe la escorrentía del entorno. Al igual que ocurre con los jardines de lluvia, el agua se evacua en menos de 48 horas o se recircula de manera constante hasta su eliminación, para evitar la cría de mosquitos y los malos olores. Es el soporte de actividad social del entorno, constituyen una infraestructura verde y azul.

Un ejemplo de este tipo de espacios es el Parque Urbano “La Marjal” en Alicante. Desarrollado por Aguas de Alicante en colaboración con el Ayuntamiento de Alicante.

Ejemplo de rain garden | Fotografía de Urban Patch

  1. Franja Filtrante

Superficie cubierta de vegetación con una pequeña pendiente para generar un flujo lento. Se produce un filtrado a través de la vegetación, que produce una disminución de la velocidad del agua y una sedimentación de contaminantes. Se suelen usar en márgenes o medianas de carreteras.

  1. Pozo de infiltración

Pozo poco profundo, entre 1 y 3 m relleno con material drenante, al que vierten las superficies impermeables contiguas. Facilitan la eliminación de la materia en suspensión. Se recomienda en zonas con poco espacio

  1. Dren filtrante

Zanja poco profunda rellena de material filtrante, al que se puede añadir un conducto. Captan y filtran la escorrentía de las superficies impermeables contiguas para transportarlas. Suele aplicarse en los laterales de las carreteras.

  1. Cuneta verde

Canal ancho vegetada. Su forma suele ser trapezoidal o parabólica en sección, con una base ancha y un talud tendido en los laterales.

  1. Depósito de infiltración

Depresión en el terreno cubierta de vegetación que recoge, almacena e infiltra el agua de manera gradual.

  1. Depósito de detención

Depósito donde se almacena de manera temporal agua procedente de la escorrentía aguas arriba. Pueden situarse en zonas “muertas” o compaginados con espacios recreacionales. Pueden ser en superficie (similares a los depósitos de infiltración, pero con más profundidad) o enterrados.

  1. Estanque de retención

Lagunas artificiales con vegetación acuática, profundidad entre 1.2m – 2 m, con una lámina permanente de agua (entre 2 y 3 semanas). Para contener el agua, la base ha de ser impermeable. El inconveniente es que puede llegar a necesitar agua en estaciones secas y generar molestias por la presencia de malos olores o mosquitos. Para paliar estos inconvenientes se pueden combinar con otras soluciones basadas en la naturaleza como la depuración natural mediante plantas de ribera y recircular el agua, tal como hicimos en “La misteriosa historia del jardín que produce agua”.

Parque urbano “La Marjal” en Alicante | Autoría fotografía: Aguas de Alicante

  1. Humedal

Similar al estanque de retención, con menor profundidad y mayor densidad de vegetación aporta por lo tanto mayor potencial para la biodiversidad y el uso y disfrute de las personas. Como tiene los mismos inconvenientes que el anterior, también se puede combinar con otras soluciones basadas en la naturaleza: depuración natural mediante plantas de ribera, recirculación, control biológico de mosquitos mediante la introducción de peces insectívoros y nidos de aves insectívoras.

“La misteriosa historia del jardín que produce agua” | Autores de la obra: cómo crear historias | Autor fotografía: David Frutos

  1. Aljibe

Contenedor de agua de lluvia que permite su aprovechamiento. Se interceptan las aguas de lluvia del entorno para almacenarse en él y luego emplearse en usos que no requieran agua potable, como el riego, limpieza de vehículos… Esta solución también la empleamos en “La misteriosa historia del jardín que produce agua”.

“La misteriosa historia del jardín que produce agua” | Autores de la obra: cómo crear historias | Autor fotografía: David Frutos

  1. Alcorque estructural o de infiltración

Comprende el hueco en el pavimento donde se planta el árbol y todo el suelo estructural que lo rodea, de tal manera que permita el desarrollo de las raíces y no interfiera en los servicios urbanos. Este suelo, está formado por gravas o celdas rellenas con tierra vegetal para albergar de manera temporal la escorrentía, de tal forma que el exceso de agua se filtra al terreno si es posible o se redirige.

  1. Celdas y cajas reticulares

Estructuras modulares reticulares de polipropileno con gran capacidad portante y elevado índice de huecos. Las celdas son planas que transportan el agua y las cajas suelen ser paralelepípedas para almacenar agua de manera temporal. Van ubicadas de manera subterránea en combinación con gravas y geotextiles.

Un par de ejemplos son los sistemas permeables Permavoid 150 de Swan y los de SUDS-Atlantis

Pautas generales para el diseño

Tienes que combinar los diferentes tipos de SUDS antes descritos para intentar reproducir en la medida de lo posible, la hidrología natural y restaurar el ciclo del agua. Tiene que ser una tarea multidisciplinar que involucre a diferentes agentes implicados en el proceso y que englobe hidrología, hidráulica, geotecnia, cálculo de estructuras, impactos ambiental, paisajismo, urbanismo, etc. Para ello, se tiene que establecer una cadena de gestión de la escorrentía que incluya (Perales Momparler & Andrés-Doménech, 2008):

  1. Prevención: educación, planificación minimizando las superficies impermeables, control de sedimentos, contaminantes, herbicidas, recogida y reutilización de pluviales, entre otras medidas.
  2. Control en origen de la escorrentía tanto en la fuente como en sus inmediaciones.
  3. Gestión del agua en el entorno urbano a escala local.
  4. Gestión de la escorrentía en las cuencas, a escala regional.

Tal como concluye Sara Perales Momparler e Ignacio Andrés-Doménech (Perales Momparler & Andrés-Doménech, 2008), un buen planeamiento, diseño, construcción y mantenimiento de los SUDS, puede mitigar los efectos de la escorrentía urbana, produciendo ahorros entre el 18% y el 50% en tratamiento respecto a los sistemas convencionales, así como en los costes de construcción.

Es necesaria una labor de concienciación a todas la escalas (ciudadanos, empresas públicas y privadas, administración, universidad…), la elaboración de manuales de diseño y construcción, normativa, monitorización de experiencias, investigación y actualización de los nuevos conocimientos y lo más importante, la puesta en práctica de estos sistemas para contribuir a la renaturalización de la ciudad.

¿Te unes?

Agradecimientos:

Eva María Alcón Martín (ingeniera agrónoma y directora comercial de Swan Water Solutions)

Pedro Lasa (socio y director de SUDS – Atlantis)

Nuria Preciado (bióloga consultora en sistemas verdes urbanos de Urban Espora

Clara Rovira (responsable de biodiversidad en Suez España) y Amelia Navarro Arcas (Directora de Desarrollo Sostenible de Alicante)

Gracias por las referencias, documentación y fotografías que habéis aportado, han sido cruciales para la redacción de este artículo.

 

Fotografías: (Por orden de aparición)

Vista general de “La misteriosa historia del jardín que produce agua” | Autores de la obra: cómo crear historias | Autor fotografía: David Frutos

New Orleans | Fuente: Pixabay

Diagramas del ciclo del agua en la naturaleza y en la ciudad | Infografía: cómo crear historias | Fuente: Hidrología Sostenible e Iglesias Diaz, 2013

Inundación  | Fuente: Pixabay | Autoría: skeeze

La misteriosa historia del jardín que produce agua” (2 imágenes) | Autores de la obra: cómo crear historias | Autor fotografía: David Frutos

Detalle de Parque urbano “La Marjal” en Alicante | Autoría fotografía: Aguas de Alicante

Sistema de cubierta ajardinada de Espora | Autoría: Espora

Ejemplo de rain garden | Fotografía de Urban Patch

Parque urbano “La Marjal” en Alicante | Autoría fotografía: Aguas de Alicante

La misteriosa historia del jardín que produce agua” (3 imágenes) | Autores de la obra: cómo crear historias | Autor fotografía: David Frutos

 

Bibliografía:

Consorcio de Compensación de Seguros. (2018). La cobertura de los riesgos extraordinarios en España.

González, D. P. (2019, noviembre 20). Así influimos los humanos en las inundaciones de la cuenca mediterránea. The Conversation.

Gregori, J. (2019, septiembre 13). 50.000 construcciones en zonas inundables. Cadena SER.

Iglesias Díaz, M. I. (2013). Jardines de lluvia.

IUCN. (2017, julio 14). ¿Qué son las Soluciones Basadas en la Naturaleza? IUCN.

Lorca, M. P. (2019, octubre 2). ¿Quién produce el oxígeno que respiramos? La respuesta flota en los océanos. The Conversation.

Observatorio de la Sostenibilidad. (2019, septiembre 14). Inundaciones. Observatorio de la Sostenibilidad.

OMS. (2010). Urbanización y salud. Boletín de la Organización Mundial de la Salud, 88, 241-320.

Perales Momparler, S., & Andrés-Doménech, I. (2008). Los Sistemas Urbanos de Drenaje Sostenible: Una Alternativa a la Gestión del Agua de Lluvia.

Perales Momparler, S., Calcerrada Romero, E., & Green Blue Management S.L.U. (2018). Guía Básica de Diseño de Sistemas de Gestión Sostenible de Aguas Pluviales en Zonas Verdes y otros Espacios Libres. Área de Gobierno de Medio Ambiente y Movilidad. Ayuntamiento de Madrid. Dirección General de Gestión del Agua y Zonas Verdes.

Toharia, M. (2019, octubre 9). Más árboles en las ciudades. El País.

Trapote Jaume, A., & Fernández Rodríguez, H. (2016). Técnicas de Drenaje Urbano Sostenible. Instituto Universitario del Agua y de las Ciencias Ambientales.

“La misteriosa historia del jardín que produce agua” | Autores de la obra: cómo crear historias | Autor fotografía: David Frutos